2015

Artículo de opinión de Eduardo Tormo, concejal del Partido Popular de Alcoy

Si no fuera porque se trata de un tema muy serio para el futuro de nuestra ciudad, habría que tomárselo a broma. Aunque es verdad que el caos en el gobierno socialista de Alcoy, o mejor dicho el desgobierno, es patético. Miremos hacia donde miremos, encontramos descoordinación, improvisación, desconocimiento y un sinfín de despropósitos que no hace falta seguir mencionando. Da la impresión de que vamos a perder cuatro años vitales para el futuro de alcoyanas y alcoyanos. De hecho, cada vez más son los que hacen sus maletas y se preparan para un futuro “mejor” fuera de nuestra ciudad.

Es posible que digan ¿otra vez está este concejal de oposición con las mismas?, como alcoyano ya quisiera yo que no fuera así, pero juzguen ustedes. A penas hace quince días, el sr Gomicia, a la sazón Teniente de Alcalde, reconocía en una televisión, que ahora el gobierno socialista apuesta claramente por la implantación de Alcoinnova. Eso sí, se niegan a retirar los contenciosos, porque dicen querer dar participación a la ciudadanía. Y digo yo, ¿no hubiera sido más fácil haber dicho que sí? con todos los condicionantes que se quisieran, desde un primer momento. Sin duda nos hubiéramos ahorrado esfuerzos, polémicas estúpidas, y recursos económicos. Y además, y lo más importante, posiblemente la empresa ya estaría instalada y tendríamos un moderno parque empresarial tecnológico y para la innovación. ¿Creen Uds. que este tipo de polémicas estériles ayudan a atraer inversiones a la ciudad? ¿Podemos renunciar a una inversión de 80 millones de euros? ¿A quién se le ocurriría instalar su empresa en una ubicación con la que el Ayuntamiento mantiene un contencioso?. Para todas estas preguntas yo me planteo al menos una respuesta: No se puede seguir ahuyentando a más empresas.

Esta situación me invita a otra reflexión: ¿Por qué cambia de opinión el gobierno socialista? ¿Quizá tenga algo que ver con la obsesión de nuestro alcalde por mantener su sillón en la anterior legislatura?. ¿O es que nos encontramos en un claro intento de atribuirse la iniciativa en este tema, siendo conscientes de que el proyecto ya no se puede parar?. Por cierto, y al hilo de esto me gustaría recordar que “el Partido Popular es el único partido que apoya esta iniciativa desde el minuto cero”.

Nuestro alcalde socialista ha anunciado que en tres meses concederá licencia a Alcoinnova y yo preguntó, si es verdad que tiene interés en que el proyecto salga adelante ¿por qué no conceden licencia en el plazo más breve posible? ¿De verdad, hacen falta tres meses para poder dar licencia?. ¿No creen que las máquinas deberían estar allí?. En este tema también hay que dejar claro que a partir de ahora el único responsable de que se retrase el inicio de las obras será el sr. Francés, Alcalde de Alcoy.

En fin, bochornoso espectáculo el del gobierno este fin de semana: Gomicia sí, Francés molesto por las declaraciones del Conseller que lo único que le pide es que gobierne. Realmente es normal acabar hasta el moño del tema y mientras tanto los platos rotos los paga Alcoy.

Pero estas dos últimas semanas no solo se ha hablado de Alcoinnova. A colación de la moción presentada por el Partido Popular, también se ha tratado y mucho la problemática de polígonos industriales existentes. Hablamos de una moción amable, constructiva y colaboradora con la acción de gobierno, que busca el bien de las industrias ya instaladas y de los trabajadores que todos los días sufren el estado lamentable de los polígonos.

Es una moción que ha aprobado el pleno con el voto positivo del gobierno, eso sí, a regañadientes porque según aludía su portavoz sr. Martínez a ellos les gusta hacer las cosas poco a poco y no gastar dinero en el análisis de la situación o lo que es lo mismo, la improvisación a una planificación bien ordenada, lo que conocemos comúnmente como “anar tapan forats”.

Nuestros polígonos industriales tienen carencias de servicios y en ocasiones cuentan con infraestructuras obsoletas, o con la necesidad de renovación, de seguridad, de telecomunicaciones incluso de accesos. Algunos de los más claros ejemplos: el acceso del Santiago Paya, que lleva ya cuatro años siendo provisional e insuficiente o el de la rotonda en el acceso Norte para dar entrada a Cotes Baixes. En esta rotonda los técnicos se tendrán que estrujar mucho el cerebro, pues con el pequeño espacio con el que se cuenta dudo si podrán cumplir las normas técnicas de rotondas o si la pequeña rotonda que allí cabe tendrá capacidad suficiente para absorber el tráfico pesado de camiones y trailers. No sé si otra ordenación del tráfico sería más adecuada. A ver si al final, intentando vestir un santo desvestimos a otro y además nos dejamos en el camino unos cuantos miles de euros que, como siempre, salen del bolsillo de los ciudadanos.