febrero 2018

Artículo de opinión de Eduardo Tormo, concejal del PP en Alcoy

Sin duda, lo peor que puede hacer un gobernante es dar la espalda a sus conciudadanos. Es el principio de los excesos de confianza y de los endiosamientos que tanto distancian al político de la realidad cotidiana de los vecinos. En este momento, empieza el principio del fin.

Protestas en el salón de Plenos

Llevamos unos meses, en los que el sr. Francés nos deleita con su risa nerviosa en el salón de plenos. Y no es para menos, cuando no tiene una protesta de la policía local, tiene la de los propietarios de perros por el polémico ADN o la de los trabajadores de concesionarias públicas. ¿Qué colectivo tendremos en el pleno del próximo lunes?

Otra prueba evidente, de la pérdida de popularidad del gobierno socialista de Alcoy, es la escasa asistencia que han tenido en las reuniones con las asociaciones de vecinos. Querían dar a conocer su gestión y si se descuidan no suman ni para una partida de cotos.

Carril bici en Zona Norte muy contestado por vecinos y comerciantes

Escuchando esta semana, un programa radiofónico donde los oyentes expresan sus quejas y felicitaciones, me ha quedado claro, cuál es la realidad de la relación entre los alcoyanos y el gobierno socialista de Toni Francés.

Esta semana, principalmente, hablaban los enojados vecinos de la Zona Norte, por la construcción de un carril bici, que nadie les ha consultado. Muchos de ellos, se preguntan por el número real de ciclistas de la ciudad. Y es que, no siendo mala, de por sí, la implantación de un carril bici, ésta debe ser precedida por campañas de concienciación y educación vial, por los consensos oportunos y por una planificación minuciosa. Una vez más, la desinformación, la falta de rigurosidad y planificación han convertido a este proyecto en un tema polémico y controvertido. Casi nada, treinta y pico mil euros….

Promesas, promesas y promesas. Grandes vendedores de humo

De la lectura de la prensa, me quedo con dos nuevas declaraciones de intenciones del gobierno socialista y con otro ejemplo de gestión catastrófica.

La primera, es el inicio del estudio de soluciones para el barrio del Partidor, ¡ahora! cuando apenas quedan 15 meses para finalizar la legislatura. Tiempo al tiempo, con la agilidad que caracteriza a este gobierno, no llegará ni a consensuar un borrador. ¡Otra legislatura perdida para este barrio!

La segunda declaración es la que anuncian que siguen trabajando para la integración de la Colonia de Aviación en la trama urbana alcoyana”. Éste es otro proyecto del que al menos llevan toda esta legislatura hablando ¿Cuándo verá la luz?

Y por último la gestión catastrófica, ¿o no lo es, la gestión del Principal? La falta más absoluta de previsión pone en la cuerda floja la escuela de teatro o las propias representaciones del Tirisiti. Che, quin desastre!

La sensación es que nunca se acaba de despegar, y que siempre están ahí, vendiendo  humo. Con todo y con esto el gobierno socialista continuará, porque es su “modus operandi”, con su política del “Farem, farem… per a después no fem res” desilusionando día tras día a los alcoyanos.

No hablaremos del PGOU, del que ya no se habla, de la rehabilitación estructural (la más importante) del Puente de San Jorge, de la famosa manzana de Rodes (que mos caura i es quedarem com fava), del acceso definitivo al Polígono Santiago Paya, del puente de Serelles, la ciudad deportiva del Alcoyano, la rotonda del acceso Norte y un largo etc de anuncios vendidos a bombo y platillo que no arrancan y lo peor de todo es que muchos de ellos no arrancarán.

Nos encontramos ante un gobierno, consciente de su parálisis e incapacidad de gestión durante ya siete años, que intenta aprobar el examen estudiando el último día. Un gobierno, del que la ciudadanía ya se ha dado cuenta, que ha funcionado a salto de mata. Un gobierno con la suerte de cara de la aritmética electoral y con algún pacto no escrito y no reconocido. ¿De verdad creen que Alcoy puede soportar cuatro años más de gobierno socialista? ¿Qué legado deja Toni Francés?

Confío que los alcoyanos tomen buena nota y sepan decidir, el año que viene, lo que es bueno para Alcoy. Alcoy necesita un gobierno que le devuelva la ilusión y la confianza. Este gobierno cansado, y que ya no cree en sí mismo, no parece ser el más indicado para estos menesteres.