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El Ayuntamiento de Cocentaina sigue evaluando los daños que produjo en la población el último temporal de nieve, lluvia y viento.

Uno de las principales consecuencias han sido las filtraciones en las aguas del pozo de La Querola, que abastecen al depósito de Santa Bárbara, y que han provocado que el agua no sea apta para el consumo humano en la parte alta de la Villa Condal. El Consistorio informó de esta situación el pasado domingo y destacan que se sigue trabajando en resolver la situación “continúan realizándose los análisis pertinentes para evaluar y determinar el momento en que esta filtración natural se detenga”, explican.

En lo que respecta a la nieve, que cayó con fuerza en las primeras horas de la mañana del miércoles 18 de enero, las actuaciones se centraron en limpiar las calles y los accesos a servicios básicos como el Centro de Salud mientras que se decidió suprimir la actividad en los colegios y en el Centro Social. Debido a la lluvia se cortaron también los caminos rurales que discurren por el río y las precipitaciones provocaron varias incidencias a causa de que la tierra todavía no estaba seca desde el último episodio de fuertes lluvias.

Por otra parte hay que destacar que en el fin de semana se atendieron diversas situaciones provocadas por el agua y por el viento, como la caída de árboles, la localización y el acotamiento de desprendimientos, cortes en el suministro eléctrico, tala de pinos o delimitar aquellas zonas afectadas para que no representaran ningún problema para conductores y transeúntes.

Finalmente desde el Ayuntamiento de Cocentaina agradecen el trabajo y esfuerzo realizado por todo el personal de la concejalía de Obras y Servicios, la Policía Local y los Bomberos.